Desayunos Cinco Días: Sociedades de Garantía Recíproca

El periódico económico Cinco Días ha celebrado un Desayuno informativo sobre las Sociedades de Garantía Recíproca y su actividad y función, con la participación de nuestro Director General, Antonio Vega. Recogemos el contenido informativo de este ecuentro en donde se pone de manifiesto el importante papel de las SGR para la economía de nuestro país y la financiación empresarial.

———-CINCO DÍAS: Ver innformación Cinco Días————————————————————————

Autónomos y pequeñas y medianas empresas (pymes) afrontan 2023 con más incertidumbre, si cabe, que la que experimentaron en marzo de 2020, cuando se decretaron los confinamientos por la pandemia de Covid-19 y la economía global sufrió una severa ralentización. La segunda mitad de este año ya está dejando entrever las consecuencias de varias crisis seguidas (suministros, materias primas y la energética derivada de la guerra en Ucrania) materializadas en la primera subida de tipos de interés en una década, anunciada por el Banco Central Europeo (BCE) con el objetivo de frenar una inflación galopante que afecta al conjunto de la Unión Europea (UE).

El sistema bancario tampoco es ajeno a esta coyuntura. En los últimos meses, ha ido exigiendo más garantías para el acceso a la financiación de las pymes o los profesionales autónomos que acuden por su cuenta hasta alguna oficina interesándose por un préstamo para, por ejemplo, invertir en nueva maquinaria o adquirir un inmueble. A ello se le suma el incremento en el tipo de interés en estas operaciones, el de los costes y el recorte en los recursos para financiar nuevos proyectos.

“Es ahí donde nosotros tenemos que estar”, adelanta José Carlos Montes, director general de Avalia Aragón, una de las 18 Sociedades de Garantía Recíproca (SGR) que hay en España y que, de enero a octubre de este año, han inyectado 1.835 millones de euros a pymes y autónomos (conforman más del 90% del tejido empresarial español), facilitando financiación a un total de 18.201 proyectos.

Sociedades de Garantía Recíproca: la vía anticrisis para pymes y autónomos

 

La pandemia fue un antes y un después. Las SGR dieron un paso adelante muy importante, duplicando el nivel de avales concedidos

José Pedro Salcedo Herce. Presidente de CESGAR y presidente de Sonagar

 

Estas organizaciones sin ánimo de lucro tienen una razón social muy definida: desarrollar la actividad económica, la creación de empleo y la riqueza empresarial de este tipo de empresas, avalando sus operaciones ante los bancos y obteniendo condiciones ventajosas para ambas partes gracias a los convenios suscritos entre estas entidades financieras y las bancarias que, a su vez, tienen garantizada la viabilidad de la operación.

El tener “medio resuelto” el aspecto financiero permite a una pyme “dedicarse a todo lo que necesita”, reconoce el presidente de la Confederación Española de Sociedades de Garantía Recíproca (CESGAR), que representa a las SGR, y también presidente de Sonagar (SGR de Navarra), José Pedro Salcedo Herce. Al funcionar toda la cadena, desde los proveedores hasta los clientes, se cumplen los compromisos del empresario.

Sociedades de Garantía Recíproca: la vía anticrisis para pymes y autónomos

 

Uno de nuestros principales retos es ser uno de los instrumentos que estén realmente encima de la mesa de las pymes y los autónomos

Antonio Vega. Director general de Garántia SGR

 

Espíritu “anticíclico”

Si parece que lo peor “está por venir”, asume Josep Lores, consejero delegado de Avalis Catalunya SGR, con tipos de interés más altos, más repreciaciones y más revisiones anuales en las nuevas operaciones suscritas por las pymes, advierte que, para dentro de unos meses, “lloverá sobre mojado”. Donde más se notará será en “los márgenes” de las pequeñas empresas, algo en lo que coinciden los presidentes de cuatro SGR durante un desayuno informativo organizado por Cinco Días y CESGAR moderado por Nuño Rodrigo, subdirector de Cinco Días.

Sociedades de Garantía Recíproca: la vía anticrisis para pymes y autónomos

 

El programa de apoyo al emprendimiento industrial con fondos Next Generation que vehiculamos las SGR ha sido un éxito

Josep Lores. Consejero delegado de Avalis de Catalunya

 

Es en ese escenario incierto donde estas entidades se están mostrando especialmente necesarias. Como indica Lores: “somos anticíclicos”, en referencia a que, cuanto peor va la economía, más se refuerza el papel de las SGR. Solo durante la pandemia duplicaron su actividad, inyectando cerca de 2.730 millones de euros en 37.940 avales a pymes y autónomos afectados por el impacto económico de la Covid-19.

Según los datos de CESGAR, esto sirvió para que se mantuvieran alrededor de 275.300 puestos de trabajo durante 2020, dato que adquiere especial relevancia cuando, en diciembre de ese año, el número de pequeñas y medianas empresas con trabajadores había disminuido en 44.644 con respecto a diciembre de 2019.

El caudal económico que actuó de tabla salvavidas para muchas pequeñas empresas y autónomos en ese periodo se asentó sobre el sistema nacional de garantías, fortalecido en gran medida por el refuerzo del reaval de CERSA (Compañía Española de Reafianzamiento), que en 2020 asumió un riesgo por reafianzamiento de 1.873 millones de euros, lo que supuso casi triplicar su actividad con respecto a 2019. En 2021, CERSA también renovó su compromiso para garantizar la renovación de los avales y la ampliación de los plazos de amortización y carencias a las pymes y autónomos que lo necesitaran.

Vehiculando los fondos europeos

Sociedades de Garantía Recíproca: la vía anticrisis para pymes y autónomos

 

Gracias a nuestra intervención, miles de empresas han conseguido la financiación adecuada a las necesidades del proyecto que querían llevar a cabo

José Carlos Montes. Director general de Avalia Aragón SGR

 

No obstante, una parte importante de los reavales se nutre de fondos europeos, cuya significación ha recobrado un papel crucial para reactivar la economía pospandémica y que, en España, se canalizan a través de los Planes de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) impulsados por el Gobierno.

Uno de ellos, anunciado el pasado abril, es el programa de apoyo al emprendimiento industrial, fruto de un acuerdo entre el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, CESGAR y diez de las principales entidades de crédito: Abanca, BBVA, Banco Cooperativo español, Banco Sabadell, Banco Santander, Bankinter, CaixaBank, Kutxabank, Ibercaja y Unicaja.

En total, 75 millones de euros a pymes industriales que serán canalizados por CERSA y vehiculados por las SGR, con el objetivo de que empresas que se pensarían dos veces invertir en el sector industrial, lo hagan, asegurando su sostenibilidad gracias a unas condiciones favorables: están destinados a cubrir la totalidad de los costes financieros de las operaciones a largo plazo (las que se extienden entre los ocho y los doce años, según el proyecto), al 1,8% del interés y el 0,50% de comisión, más las comisiones del aval.

El presupuesto prevé alcanzar para unas 1.500 empresas, extendiéndose el plazo a finales de 2023 o hasta que se agoten los recursos. A 30 de septiembre, las SGR habían formalizado 800 operaciones por valor de 210 millones de euros, lo que mueve a Lores a calificarla como una línea “que está teniendo una buena acogida y está funcionando muy bien”, hasta el punto de ser “uno de los pocos temas de Next Generation materializados”, ya que se puso en marcha hace apenas cinco meses.

Las subvenciones están llegando con apenas tres o cuatro de margen y se aplican a “reducir deuda”, completa Antonio Vega, director general de Garántia Andalucía SGR. Este programa, calificado como un “éxito”, es además un “excelente ejemplo de colaboración público-privada”, al conseguir una “atomización importante” en la inyección de fondos públicos.

Una alternativa complementaria al banco

Las principales beneficiarias de las SGR son empresas de menos de 25 trabajadores en su plantilla, siendo receptoras de hasta el 75% de la financiación total, apunta Montes. Debido a la mayor vulnerabilidad que presentan ante los reveses económicos, las iniciativas de estas entidades financieras han ido encaminadas a apoyar a pymes y autónomos. Durante la pandemia, se habilitaron unas líneas Covid y, tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia, han lanzado unas “líneas especiales” para financiar tanto el circulante como la inversión para aquellas compañías especialmente afectadas por el encarecimiento de las materias primas o los costes energéticos.

Sin ir más lejos, en julio del año pasado vio la luz Aquisgrán, un fondo de titulización general creado por las SGR que se fondea a través de bonos emitidos y suscritos por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), con la garantía del Fondo Europeo de Inversiones (FEI). Una vez disponibles, esos fondos costean préstamos avalados por las SGR y cubiertos por CERSA. Es, detalla Montes, “una alternativa complementaria a la pyme para financiarse en algo que no sea estrictamente en los bancos”, concediendo financiaciones a un plazo máximo de diez años y un tipo fijo de interés (del 3,9% en la actualidad).

Además, en el aspecto de la digitalización está la plataforma ‘Con Aval Sí’, un proyecto sectorial creado en 2017 que actúa como una “vía digital de entrada de operaciones y solicitudes” fundamental durante la pandemia, precisa Vega, época en la que multiplicó por cuatro el volumen de solicitudes tramitado respecto a 2019 (41.498 solicitudes, por un importe de 4.393 millones de euros). Al respecto, destaca cómo está reduciendo las brechas de la “exclusión rural”, pudiendo “estar cerca de las empresas” en aquellas poblaciones alejadas a las que les cuesta más trabajo acceder a sus servicios.

Si bien el modelo al que aspiran las SGR es mixto: “hay muchas empresas que lo que quieren es una voz amiga, tenerlos delante, y asesorar”, señala, por lo que también recuerda que la red de oficinas de las SGR en todo el territorio español está abierta para cualquier empresa o institución. En Andalucía, territorio de su competencia, Garántia ha iniciado una colaboración con la Junta para ayudar a las empresas industriales, además de habilitar una ventanilla para las gasolineras ante los problemas con el circulante.

Este asunto, junto al de la caída de los créditos ICO debido al hundimiento de la garantía del 80%, brindan la oportunidad para que las SGR se conviertan “en proveedor habitual de las pymes”, concluye Vega.

EL PAPEL DE CESGAR EN EL ECOSISTEMA PYME

Sector. La financiación facilitada por el sector ya beneficia a 168.356 pymes, autónomos y emprendedores, que mantienen activos créditos y préstamos por valor de 6.923 millones de euros (riesgo vivo) y contribuyen al mantenimiento de 953.037 puestos de trabajo. Solo en 2021, más de dos millones de pymes (57,9%) necesitaron financiación, el porcentaje más elevado de la serie histórica, según la XI edición del Informe de Financiación de la Pyme elaborado por CESGAR.

Amortización. Dos de cada tres empresas con apoyo de las SGR afrontan la amortización de sus préstamos o créditos en un plazo superior a los 8 años y en un 89% de los casos, el periodo de devolución establecido se sitúa por encima de tres años.

Bancos. Las SGR tienen firmados convenios con Banco Santander, Banco Sabadell, Caixabank, Bankinter, Banco Cooperativo, Cajamar, Ibercaja, Abanca y Grupo Caminos, pero se muestra totalmente abierta a colaborar con todo el ecosistema bancario. El aval de una de estas entidades financieras asegura la devolución del crédito para el banco.

Socios. En la actualidad, CESGAR cuenta con un total de 168.356 socios y tiene el respaldo de más de 800 instituciones consideradas como socios protectores. La confederación está presente en todas las comunidades autónomas, además de contar con una sociedad de carácter sectorial, pudiendo respaldar cualquier proyecto viable en cualquier rincón del territorio nacional. De hecho, más del 80% de las operaciones que llegan a la ventanilla de una SGR son aprobadas.

Visibilización. La asociación tiene como uno de sus principales retos aumentar el conocimiento del ecosistema pyme y autónomo sobre los servicios que realizan. Por esta razón, están realizando un estudio para identificar el grado de conocimiento y percepción que las empresas tienen de las SGR, con el fin de identificar posibles mecanismos de actuación que ayuden a mejorar el nivel y calidad de ese conocimiento.

Ver edición impresa Desayuno Cinco Días sobre las SGR

Garántia apoya al Instituto Español de Analistas Financieros (IEAF)

Garántia ha patrocinado el acto celebrado en Sevilla de la delegación del Instituto Español de Analistas Financieros (IEAF) en Andalucía de entrega de la Insignia de Oro del IEAF-FEF 2022, en este caso al sevillano Javier Molina, presidente de Befesa, en reconocimiento a su trayectoria profesional.

Al acto asistieron el Director General de Garántia, Antonio Vega, el Director Comercial, Ignacio Rodríguez Cepeda, acompañados de Fernando Faces, Victoria Villalobos, Manuel Fuentes, Antonio Higueros, Jaime Lastra, Manuel Fontán, y Javier Tornero.

La entrega tuvo lugar durante la celebración de la Cena de Gala del IEAF-FEF, organizada en Sevilla junto a la Cámara de Comercio de Sevilla y al Club Cámara Antares. El acto contó con la presencia de la presidenta del IEAF-FEF, Lola Solana; el presidente de la delegación del IEAF-FEF en Andalucía, Ignacio Fernández-Montes Prieto; el presidente de la Cámara de Comercio de Sevilla, Francisco Herrero León; y representantes de entidades financieras, gestoras y empresas de servicios de inversión.

Durante su intervención, el presidente de Befesa, Javier Molina, realizó un recorrido por los diferentes momentos en los que su trayectoria profesional se ha visto vinculada a distintas actividades de analistas financieros. Asimismo, destacó la gran oportunidad de inversión que supone la empresa Befesa incluso en estos momentos de gran incertidumbre económica.

El Instituto Español de Analistas Financieros (IEAF) es una asociación profesional sin ánimo de lucro que agrupa a más de 1.200 profesionales del análisis, de la inversión y de la gestión financiera. Su objetivo es agrupar a la profesión de analistas y representar sus intereses, ofreciéndoles servicios profesionales para analistas financieros, formación en finanzas y mercados, productos de análisis financiero y sostenibilidad, y estudios y promoción de la investigación financiera. Cuenta con diferentes delegaciones ubicadas en Cataluña, Andalucía, País Vasco, Galicia, Valencia y Canarias.

El IEAF está formado por tres entidades que trabajan para cumplir con el objetivo marcado: la Fundación Estudios Financieros, que es el centro de análisis del Instituto; la Escuela FEF, que es una escuela de formación dirigida a profesionales y estudiantes del sector financiero; y Lighthouse, el servicio de análisis que cubre los “valores huérfanos” de la Bolsa española.

TINSA imparte una charla formativa en Garántia

Enrique Gutiérrez, Director de Entidades Financieras de TINSA ESPAÑA, ha impartido este martes, 15 de noviembre, una sesión formativa de introducción a la normativa de valoración hipotecaria, desarrollada en la sede de Garántia en Sevilla.

En esta jornada formativa han participado de forma presencial y telemática una representación de todas las áreas de la compañía.

En su intervención, Enrique Gutiérrez ha repasado los aspectos fundamentales de la normativa ECO/805/2003 como son las comprobaciones ECO, el tratamiento de los condicionantes y las advertencias, los principios, bases y metodologías de valoración, o el valor de tasación, y ha respondido con numerosos ejemplos a las cuestiones planteadas por los asistentes de todos nuestros departamentos (Comercial, Riesgos, Jurídico, Administración, Auditoría, y Financiero).

Agradecemos desde Garántia a TINSA su colaboración en la realización de esta sesión formativa.

sesion-formativa-tinsa

Garántia analizando la financiación a pymes y el papel de las SGR

Garántia ha participado junto con Aquisgrán y Caja Rural del Sur en un Coloquio Profesional organizado y publicado por ABC de Sevilla en el que se ha analizado la financiación a pymes en tiempos de incertidumbre.

Además el coloquio contó con la participación de nuestro Consejero y economista, Fernando Faces. Recogemos la publicación de las conclusiones de este coloquio en el que se abordó el papel de las SGR para la economía andaluza.


Emprender es arriesgarse, apostar por un proyecto y hacer una inversión, no solo de recursos, sino también de tiempo y esfuerzo sin tener el éxito asegurado. No es una decisión fácil ni que se pueda tomar a la ligera, por ello, existen herramientas, muchas veces no lo suficientemente conocidas, para ayudar a los emprendedores en su andadura.

Es el caso de Garántia, la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR), una entidad con carácter financiero y sin ánimo de lucro nacida para ayudar a autónomos y pymes a acceder a la financiación de bancos y otras entidades; actúa como una suerte de avalista, minimizando el riesgo y, como resultado, logrando tipos bajos de financiación. Para hablar de su utilidad y la economía actual se han reunido varios profesionales del sector.

 

Fernando Faces, consejero de la SGR Garántia y profesor de San Telmo Business School, asegura que «los organismos están anunciando el inicio de una posible recesión en el cuarto trimestre que, en el mejor de los escenarios, se prologaría durante los tres primeros meses de 2023 […] a la inflación de demanda se une otra de costes por la subida de las materias primas y la energía, la ruptura de las cadenas de suministros y los cuellos de botella».

 

A ello añade que «los bancos centrales se encuentran en un dilema: cuánto tienen que subir los tipos de interés para poder frenar la inflación, cuando esta política monetaria no es la adecuada: tiene un efecto, pero muy débil.

Entonces, se ven obligados a subir los tipos de una manera bárbara, a dar una dosis de caballo para poder tener algún efecto sobre los precios, ya que la inflación, una vez que se enquista, se hace permanente, estructural».

 

Tanto el incremento de costes como la subida de los tipos de interés afectan de forma directa a unas pymes que ven como, al mismo tiempo, el consumo decrece:
«La pyme es el eslabón más vulnerable […] siempre ha tenido problemas de acceso a la financiación y, cuando la ha conseguido, lo ha hecho en unas condiciones peores, salvo que trabajen con las SGR».

Es por ello que Antonio Vega, director general de Garántia, define a estas sociedades como «un elemento imprescindible que facilita el acceso al crédito y con mejores condiciones: plazo, importe, garantía, tipo de interés…» y considera que «en los momentos de incertidumbre es un apoyo fundamental para poder hacer frente a las dificultades que pueden surgir como consecuencia del escenario económico»:

«Nos convertimos frente a las entidades que financian a las pymes en su contraparte, de tal manera que el riesgo que ellos asocian es el riesgo que tienen con la SGR y no con el pequeño empresario, al cual le llega el préstamo. Las SGR somos unas entidades financieras reguladas y controladas por el Banco de España, lo que asegura la estabilidad de este sistema frente a los receptores de nuestro aval, en este caso, todas las entidades financieras […]
Estamos convencidos de que para este año y el que viene, con esta incertidumbre, vamos a jugar un papel muy relevante: defender y facilitar el crédito a las empresas más pequeñas, a las más débiles, y en los momentos de mayor dificultad».

Eusebio Martín, Aquisgrán

 

Jose María Vera, Caja Rural del Sur

 

Antonio Vega, Garántia

 

Fernando Faces, Consejero de Garántia

 


Completando el circuito


La actividad de las SGR como Garántia encuentra su complemento perfecto en entidades como Aquisgrán, que, creada en 2018 por iniciativa de estas sociedades, ofrece a pymes y autónomos financiación complementaria a la bancaria.

Su director general, Eusebio Martín, explica que
«los bancos son esenciales, el crédito es la sangre del organismo de la economía en cualquier país, pero la capacidad de las entidades bancarias de dar crédito no depende exclusivamente de ellas, que están reguladas por el BCE, que les impone una serie de limitaciones de lo que pueden y no hacer.
Hay momentos en los que los bancos no tienen más remedio que restringir el crédito, incluso a clientes que ellos pensaban que podrían pagar y que contaban con el aval de un socio de garantía.
Es aquí cuando aquellas pymes que hayan diversificado sus fuentes de financiación podrán hacer frente a esta posible restricción del crédito, por eso surge Aquisgrán […]
No es bueno que el cien por cien de los préstamos de la empresa provengan de los bancos, un porcentaje pequeño en aquellos momentos o nichos en los que las entidades bancarias llegan con dificultad pueda venir de fuentes no bancarias».

Aquisgrán obtiene sus recursos directamente de inversores institucionales, emitiendo bonos que cotizan en bolsa, y evitando así el coste de recurrir a intermediarios financieros.

«De esta manera podemos dar préstamos a tipo fijo, que es algo que los bancos, por su estructura de balance, pueden hacer con bastante dificultad […]
Somos un instrumento anticíclico especialmente necesario en un momento como el actual, en el que es más que previsible una reducción del crédito.

Creo que es algo bueno para todo el mundo: para los inversores, que disponen de un nuevo activo, para las pymes, que tienen una fuente de financiación, y para los propios bancos, que tienen a alguien cumpliendo funciones a las que a ellos les cuesta más llegar y que no compite con ellos en el negocio a corto plazo […]
Hacemos posible que las pymes accedan a bolsa igual que Telefónica o Repsol en condiciones no mucho peores, y eso es positivo para todos», cuenta Martín.

Otro punto de apoyo lo constituyen entidades como Caja Rural del Sur.

José María Vera, director comercial adjunto de la compañía, explica: «Tenemos una ventaja competitiva importante, puesto que somos un banco con un modelo cooperativo, diferente al bancario, fundamentalmente, en el conocimiento del cliente; somos una entidad con un fuerte arraigo local.

Sabemos cuándo los proyectos son viables y cuándo no, conocemos la trayectoria del cliente y tenemos la gran ventaja competitiva de poder contar con una herramienta como es Garántia, de la que Caja Rural es socia y partícipe en su consejo […]
Tenemos la posibilidad de implementar nuestra base de clientes porque es cierto que la pyme y los autónomos sufren de una forma importante las crisis, pero también tienen un nivel de resiliencia altísimo, es decir, son negocios, en muchos casos familiares, que tiene una marcada capacidad de recuperación». Además, Martín destaca la robustez de este tipo de entidad:

«En la crisis anterior [la de 2008], las cooperativas de crédito demostraron una gran fortaleza, mientras que la banca y las cajas de ahorro recibieron fuertes ayudas del Gobierno, el modelo cooperativo recibió cero, no fue necesario».


Una mirada al futuro


Por otra parte, los expertos también inciden en que la SGR no solo sirve para financiar a empresas recién nacidas o que presentan alguna debilidad, sino que también puede ser útil a los negocios que quieran mantenerse a la vanguardia y avanzar al compás de un entorno cada vez más cambiante, para lo que también se requiere una inversión, como ocurre con Garántia.

Al respecto, Martín subraya: «Andalucía está siendo muy importante a la hora de hacer, por ejemplo, inversiones en energía solar, para la que está especialmente dotada.
Una de las cosas que más hemos financiado en la región, junto con Garántia, son proyectos de autoconsumo de pymes, que se dan cuenta de que, en un contexto inflacionario, la inversión más rentable es producir su propia electricidad.

Eso necesita financiación, unas inversiones que son rentables para las pymes y necesarias para la economía, la sociedad y el planeta en general».
Faces se muestra de acuerdo con esta postura: «Creo que es el factor diferencial entre lo que va a pasar en esta crisis [que el profesor define como transformadora] y lo que ocurrió en las anteriores.

Tenemos que hacer una transición energética a nivel global, dar un salto tecnológico […] Esa transición necesita digitalización, que es una condición necesaria, no suficiente; la tiene que hacer tanto la gran empresa como la pequeña porque, si no, se quedan fuera del mercado.
[…] Hay un montón de ‘startups’ [de todos los sectores] que están saliendo ahora y que requieren Inteligencia Artificial (IA), Big Data, robotización, digitalización…. […] Y, como las SGR están especializadas precisamente en proyectos de inversión, en financiación a medio y largo plazo, las pymes las van a necesitar más que nunca».

Otro reto de las SGR es hacerse con más apoyos. «Este instrumento tiene 40 años y lo que uno se pregunta es que cómo es posible que, siendo tan bueno y potente, no se haya desarrollado más.

Hay que hacer un llamamiento, no solo a las pymes, sino a las administraciones, que apuesten por esto, ya que, si hay una aportación de capital periódico, podemos hacer nuestra labor con mayor profundidad […] Las sociedades de avales están diseñadas para tener participación pública, son un proyecto sin ánimo de lucro, por eso la Junta de Andalucía tiene el 29% [de Garántia]», expone Faces.

Vega explica que el organismo autonómico se vio cada vez más atraído por la entidad desde que, en una época de tanta incertidumbre como fue la pandemia, demostrase que es una herramienta potente para apoyar a los segmentos más débiles y aplicar políticas de crecimiento; un instrumento que, además, resulta rentable: «Cada euro que mete la Junta de Andalucía aquí se multiplica por 12,5», apunta el director general de Garántia.

Por último y como tercer desafío para el futuro, los cuatro profesionales convergen en señalar que es necesario que se les conozca más, que los negocios sean conscientes de su existencia: «El principal reto que tenemos como sector es que haya más empresas que sepan que disponen de esta opción para tener apoyo y asesoramiento, así como afrontar mejor el futuro», concluye Vera.

 


La SGR, a fondo


Una SGR está formada por socios partícipes, que son los beneficiarios del aval, y socios protectores, que son los que aportan recursos. Esto se traduce en que, para que un autónomo o empresa pueda beneficiarse de un aval, debe ser socio partícipe de la sociedad.

A cambio, obtiene como beneficios el acceso a financiación cuando no disponen de suficientes garantías, condiciones favorables de plazos y tipos de interés, así como asesoramiento sobre la viabilidad del negocio.

Además, las entidades financieras que concedan un crédito a los negocios avalados por la SGR también tienen sus ventajas, ya que eliminan el riego de insolvencia y no debe encargarse de hacer el estudio técnico de la operación, tarea que corresponde a la sociedad de garantía.

Entrevista a Antonio Higueros sobre Garántia en Córdoba

La actividad de Garántia con pymes y autónomos de la provincia de Córdoba ha sido el tema abordado en esta nueva entrevista radiofónica en COPE Andalucía realizada a Antonio Higueros, directivo de la Sociedad de Garantía Recíproca andaluza.

Coincidiendo con la celebración del reciente Consejo de la compañía en Córdoba, Garántia ha inaugurado su oficina en esta capital, situada en la calle Conde de Robledo, 4, tras culminar una reforma para adaptarla al nuevo modelo comercial de la empresa.

Escúchala aquí:

Entrevista a Antonio Higueros sobre Garántia en Córdoba